Vestimenta Complementos Instrumentos
El vestuario debe estar completamente integrado con aquello que se quiere transmitir: Belleza, raza, época, sentimientos, fantasía...
Por ello, tiempo atrás, las manos expertas de los artesanos egipcios mimaron el corte de la tela, el movimiento de los flecos y las monedas o la pedrería que conseguían un movimiento más acentuado. Antiguamente, tanto hombres como mujeres usaban los abalorios como amuletos y anillos, tobilleras o collares para protegerse de los peligros
Hay mucha variedad en la vestimenta de la bailarina de danza árabe pero, en líneas generales, en cuanto a los elementos que la componen, se acomoda a la descripción que se hace a continuación.
En reglas generales, el atuendo de las bailarinas es el bedlah o conjunto de dos piezas. Dicho conjunto está compuesto por un sujetador y un fajín (adornados con pedrería, lentejuelas y flecos) y van acompañados de una falda.
La vestimenta profesional es muy pintoresca, graciosa y, al mismo tiempo, sobria y delicada: cada cosa en su lugar. Consiste en una chalequilla bordada o el equivalente a un sostén bordado con cadenillas colgantes. Si es una chalequilla, ésta es apretada pero abierta al frente sobre una, también estrecha, camisilla; largos pantalones o bombachos de seda y velo casi transparente, un pañuelo amarrado, más bien, alrededor de las caderas que a la cintura y un elegante y liviano turbante, pañuelo o adorno tipo corona, de algodón u otro material entretejido y bordado en dorado o plateado. Los pantalones se pueden sustituir por una falda.
El pelo cae en rizos hasta los hombros, con adornos de monedas doradas. Los ojos están profunda pero delicadamente pintados con kohl, lo que les da, a ellos y al rostro, una expresión muy lánguida pero al mismo tiempo misteriosa.
Una profusión de llamativos adornos brillantes sobre el pecho y un cinturón con monedas colgantes ayudan a transmitir la emoción del baile cuando se acentúa el movimiento de caderas al ritmo de la música y del vientre al compás de la llamada percusión.
En base al esquema descrito se construyen todas
las variedades imaginables: adornos con lentejuelas de diversos tipos y colores,
cinturones con colgantes, collares, aros, anillos, pulseras, etcétera.
Tradicionalmente es una danza a pies descalzos.
Usar el velo para coreografías completas es una invención puramente americana. Comienza a ser usado en la danza oriental en el siglo XX como accesorio.
El uso del velo cubriendo la mitad o todo el rostro es circunstancial y puede que sea utilizado, en nuestro mundo occidental, al comienzo de un baile de una bailarina profesional. No hay que olvidar que una mujer cubierta por el velo sólo se lo quita ante su esposo o padres o hermanos o ante quienes la religión y la tradición lo permitan
velas
Hay
dos formas de practicar danza con velas conocidas por las bailarinas: el shamadan,
con el candelabro en la
cabeza, que es una danza folklórica egipcia con sus reglas; y las velitas
sostenidas en las manos en lo que algunas llaman "danza faraónica".
"Raks al shamadán" (danza del candelabro) se ha convertido en una parte tradicional en las bodas a través del "Zeffa": procesión, con el fin de iluminar a los novios el camino hacia su nueva vida. Los creadores de la danza del candelabro fueron Zouba el Klobatiya y Shafiyya el Koptiyya a principios del siglo XX.
La danza faraónica se refleja en un baile popular de Turquía, en el cual las bailarinas llevan dos velas, una en la palma de cada mano, moviendo sus brazos en diferentes poses.
No hay que olvidar que al bailar la danza del vientre hay que tenes en cuenta algunos puntos esenciales: Coordinación, Sensualidad, Destreza, Armonía, Equilibrio, Musicalidad
En otras culturas del mundo, como Tailandia, hay otros
bailes con velas.
CRÓTALOs
Las bailarinas a menudo utilizan algún tipo de instrumento rítmico para ayudar a los músicos en el acompañamiento rítmico de sus bailes.
Las bailarinas españolas también hacen esto, pero hay evidencias de una común herencia para estas formas de danzas a través de la asociación con los gitanos y con los antiguos mercaderes fenicios. Como ejemplo de lo anterior están los címbalos metálicos, conocidos más bien como "crótalos" o "krótalos", los cuales, dos, se ponen en los dedos cordial y pulgar de las manos, respectivamente. Otro ejemplo similar es el de las castañuelas, en el caso de algunos bailes españoles.
alas
También se llaman "zils", que deriva de la palabra turca "zilya", que significa platillos, o zagat, en el idioma árabe. Estos fueron instrumentos sagrados alrededor del 1000 a.C. y se usaban en Turquía y Arabia hasta Marruecos. Son castañuelas confeccionadas de metal en vez de madera.
bastón
Hace referencia a la palabra árabe "assaya", bastón de baile. En el Said (alto Egipto), los hombres practican un arte marcial llamado "Tahtiyb", que consiste en batallar con varas de caña, conocidas como "an asa" en el idioma árabe. El "Tahtiyb" inspiró a las mujeres del Said a crear su propia danza con varas. Para interpretar "raks al assaya" (danza del bastón) se utiliza un ritmo característico: el Saidi, que hace referencia a la zona ya mencionada. La danza del bastón es actualmente un elemento característico de la danza folklórica egipcia.
sable
La danza del sable ("raks al sayf") es originaria de la danza marcial tradicional de Egipto: "El Ard", que es realizada por hombres que llevan los sables en forma vertical, listos para pelear, mientras bailan. Raks al Sayf implica balancear el objeto sobre la cabeza, cadera, estómago, hombros, etc. No existe mucha documentación que indique que la danza del sable bailada por mujeres sea común, salvo algunas pinturas.